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Importancia del ejercicio aeróbico

Colocado el jueves 28 de abril de 2016 por Mayo Clinic

La actividad aeróbica regular, como caminar, montar en bicicleta o nadar, puede ayudarte a vivir más tiempo y con más salud. ¿Necesitas motivación? Vea cómo el ejercicio aeróbico afecta a su corazón, pulmones y flujo sanguíneo. Después, ponte en movimiento y empieza a cosechar las recompensas.

Cómo responde tu cuerpo al ejercicio aeróbico

Durante la actividad aeróbica, mueves repetidamente grandes músculos de los brazos, las piernas y las caderas. Notará las respuestas de su cuerpo rápidamente.

Respirará más rápido y más profundamente. Esto maximiza la cantidad de oxígeno en tu sangre. Su corazón latirá más rápido, lo que aumenta el flujo de sangre hacia los músculos y de vuelta a los pulmones.

Sus pequeños vasos sanguíneos (capilares) se ensancharán para suministrar más oxígeno a los músculos y transportar los productos de desecho, como el dióxido de carbono y el ácido láctico.

Su cuerpo incluso liberará endorfinas, analgésicos naturales que promueven una mayor sensación de bienestar.

Lo que el ejercicio aeróbico hace por su salud

Independientemente de la edad, el peso o la capacidad atlética, la actividad aeróbica es buena para usted. A medida que su cuerpo se adapte al ejercicio aeróbico regular, se hará más fuerte y estará más en forma.

Considere las siguientes 10 formas en que la actividad aeróbica puede ayudarle a sentirse mejor y a disfrutar de la vida al máximo.

La actividad aeróbica puede ayudarle a:

  1. Mantener a raya los kilos de más
    Combinado con una dieta saludable, el ejercicio aeróbico le ayuda a perder peso y a mantenerlo.
  2. Aumentar su resistencia
    El ejercicio aeróbico puede cansarle a corto plazo. Pero a largo plazo, disfrutará de una mayor resistencia y una reducción de la fatiga.
  3. Aleja las enfermedades víricas
    El ejercicio aeróbico puede activar su sistema inmunológico. Esto puede dejarle menos susceptible a las enfermedades virales menores, como los resfriados y la gripe.
  4. Reduzca sus riesgos de salud
    El ejercicio aeróbico reduce el riesgo de muchas afecciones, como la obesidad, las enfermedades cardíacas, la presión arterial alta, la diabetes tipo 2, el síndrome metabólico, los accidentes cerebrovasculares y ciertos tipos de cáncer.

    Los ejercicios aeróbicos con peso, como caminar, reducen el riesgo de osteoporosis.

  5. Controlar las enfermedades crónicas
    El ejercicio aeróbico puede ayudar a reducir la presión arterial y a controlar el azúcar en sangre. Si tiene una enfermedad arterial coronaria, el ejercicio aeróbico puede ayudarle a controlar su enfermedad.
  6. Fortalezca su corazón
    Un corazón más fuerte no necesita latir tan rápido. Un corazón más fuerte también bombea la sangre de forma más eficiente, lo que mejora el flujo sanguíneo a todas las partes del cuerpo.
  7. Mantenga sus arterias limpias
    El ejercicio aeróbico aumenta su lipoproteína de alta densidad (HDL), el colesterol «bueno», y reduce su lipoproteína de baja densidad (LDL), el colesterol «malo». Esto puede dar lugar a una menor acumulación de placas en las arterias.
  8. Aumenta tu estado de ánimo
    El ejercicio aeróbico puede aliviar el abatimiento de la depresión, reducir la tensión asociada a la ansiedad y promover la relajación.
  9. Mantente activo e independiente a medida que envejeces
    El ejercicio aeróbico mantiene tus músculos fuertes, lo que puede ayudarte a mantener la movilidad a medida que envejeces.

    El ejercicio aeróbico también mantiene tu mente aguda. Al menos 30 minutos de ejercicio aeróbico tres días a la semana parecen reducir el deterioro cognitivo en los adultos mayores.

  10. Vive más
    Los estudios demuestran que las personas que realizan ejercicio aeróbico con regularidad viven más tiempo que las que no lo hacen.

Da el primer paso

¿Listo para ser más activo? Genial. Sólo recuerda empezar con pequeños pasos. Si has estado inactivo durante mucho tiempo o si tienes una enfermedad crónica, pide el visto bueno de tu médico antes de empezar.

Cuando estés preparado para empezar a hacer ejercicio, empieza poco a poco. Puede caminar cinco minutos por la mañana y cinco minutos por la tarde.

Al día siguiente, añada unos minutos a cada sesión de caminata. Aumente también un poco el ritmo. Pronto podrá caminar a paso ligero durante al menos 30 minutos al día y cosechar todos los beneficios de la actividad aeróbica regular.

Otras opciones de ejercicio aeróbico pueden ser el esquí de fondo, el baile aeróbico, la natación, subir escaleras, montar en bicicleta, correr, hacer elíptica o remar.

Si tiene una afección que limita su capacidad para participar en actividades aeróbicas, pregunte a su médico sobre las alternativas. Si tiene artritis, por ejemplo, los ejercicios acuáticos pueden proporcionarle los beneficios de la actividad aeróbica sin estresar sus articulaciones.