Dr. Philip Miller

29 de mayo de 2018

Un procedimiento de rinoplastia puede darle resultados que son dramáticos, satisfactorios y muy positivos. Pero la cirugía es sólo la mitad de la batalla. Una vez que haya salido del quirófano para dirigirse a casa y comenzar su recuperación, mantener estos nuevos cambios y actualizar estos resultados dependerá de usted. Aunque cada persona se recuperará a un ritmo diferente, usted puede hacer que su camino hacia la recuperación sea mucho más suave, sin complicaciones, efectos secundarios no deseados o retrasos. Conozca las cosas que debe evitar para conseguir los resultados de la rinoplastia que realmente desea y para sentirse mejor lo antes posible.

#1 – Actividades extenuantes

Mientras se recupera de su rinoplastia, debe evitar cualquier actividad extenuante como el ejercicio de alto impacto, el levantamiento de objetos pesados y cualquier cosa que implique un movimiento vigoroso. Hay varias razones para evitar estas actividades. En primer lugar, el exceso de flujo sanguíneo en la cara puede aumentar la inflamación e incluso poner en riesgo de sangrado. En segundo lugar, el sudor puede comprometer el proceso de curación de la piel. Por último, las actividades vigorosas o extenuantes pueden ponerle en riesgo de dañar la nariz. Cuando su nariz se está curando de la cirugía, los huesos a menudo no están asentados, lo que la hace más susceptible a daños, roturas y desplazamientos.

#2 – Sonarse la nariz

Las alergias, los resfriados y el virus de la gripe son difíciles de afrontar en cualquier momento del año, pero pueden ser francamente peligrosos poco después de su cirugía nasal. Durante las semanas previas a la intervención, manténgase alejado de cualquier persona que parezca estar enferma y lávese las manos con regularidad. No tenga miedo de llevar consigo un desinfectante de manos o rociar con Lysol su área de trabajo para asegurarse de que ha eliminado todos esos gérmenes. Contraer una enfermedad antes de la cirugía puede retrasar su procedimiento o, si los síntomas aparecen después de la cirugía, sonarse la nariz o moquearse puede interrumpir la curación adecuada y provocar una hemorragia.

#3 – Permanecer al sol

Aunque un día de piscina o unas vacaciones tropicales siempre parecen una buena idea, tenga cuidado. La exposición al sol puede quemar la nariz, crear decoloración en los lugares de incisión donde hay tejido cicatricial o aumentar el riesgo de ciertas complicaciones. Incluso si su cirujano plástico facial le ha dado el visto bueno de antemano, lleve un sombrero y un protector solar resistente para estar más seguro.

#4 – Llevar gafas

Si lleva gafas con regularidad, tendrá que probar las lentes de contacto durante un tiempo para dar tiempo a que su nariz sane correctamente. Las gafas se apoyan en el puente de la nariz, lo que suele provocar muescas en el cartílago y el tejido reblandecidos. Mientras la nariz esté cicatrizando, lo mejor es que deje las gafas a un lado durante un tiempo.

#5 – Golpear, chocar o tocarse la nariz

Después de la cirugía de rinoplastia, sentirá curiosidad por saber qué siente su nueva nariz, pero no es buena idea tocarla, empujarla o pincharla. No sólo le dolerá, sino que corre el riesgo de desalinear los huesos, remodelar el cartílago o deshacer los resultados de alguna manera. Para mantener la forma nasal a salvo del contacto, evite estas actividades:

• Cualquier forma de ejercicio o deporte, especialmente los de alto impacto
• Juegos de lanzar y atrapar u otras actividades en las que un objeto pueda entrar en contacto con la cara
• Tirar de la ropa por encima de la cabeza. En su lugar, utilice camisas con botones y pijamas
• Cargar o levantar objetos
• Jugar de forma brusca con los niños o las mascotas

Básicamente, intente mantener su nariz a salvo y protegida de cualquier cosa que pueda causarle una lesión. Pero, por supuesto, los accidentes a veces ocurren. Si se encuentra con algún problema después de su cirugía de rinoplastia, hable con su cirujano plástico facial sobre las medidas que puede tomar para revertir el daño o para planificar un procedimiento de rinoplastia de revisión.

#6 – Tumbarse en horizontal

Tumbarse en horizontal puede ser cómodo para algunos, pero es una actividad peligrosa para los pacientes que se operan la nariz. Con la cabeza al mismo nivel que el corazón, el flujo de sangre a la cara y la nariz aumentará. Esto puede favorecer un exceso de sangrado, un aumento de la hinchazón e incluso un mayor dolor. ¿Qué posición es la mejor? Apoye la cabeza con una almohada o duerma en una silla reclinada en ángulo.

#7 – Llevar maquillaje

No lleve maquillaje -todavía. Si bien el uso de maquillaje es una buena manera de cubrir cualquier hematoma posquirúrgico alrededor de la nariz y los ojos, la aplicación de cosméticos en la piel en curación y las incisiones puede causar complicaciones y aumentar el riesgo de infección. Evite los correctores, polvos y otros productos de maquillaje hasta que se considere que está lo suficientemente curado como para utilizarlos. Hable con su cirujano plástico facial para obtener más información sobre el tiempo de cicatrización.

#8 – Fumar y beber alcohol

Fumar y beber alcohol son actividades peligrosas para cualquier paciente que se someta a una cirugía, incluida la rinoplastia. La nicotina de los cigarrillos puede restringir los vasos sanguíneos y reducir el flujo sanguíneo a niveles muy bajos, inhibiendo la curación adecuada. El alcohol, por otra parte, puede interferir con sus medicamentos y diluir la sangre, favoreciendo un exceso de sangrado. Para estar más seguro durante su recuperación, evite fumar y beber alcohol durante al menos tres semanas después de su cirugía de rinoplastia.

#9 – Comer alimentos duros o masticables

Especialmente durante los primeros días, en los que se debe minimizar el movimiento facial,

evite los alimentos que necesiten mucha masticación. Evite masticar frutas como manzanas y peras, así como verduras crudas como las zanahorias. Las gomas y los filetes también pueden ser perjudiciales, ya que ejercen mucha presión sobre la mandíbula.

#10 – Estreñimiento

Los movimientos intestinales suelen ser irregulares justo después de la cirugía. Esta condición puede ser bastante incómoda, por lo que la mejor manera de reducir este riesgo es consumir alimentos ricos en fibra. Durante los primeros días, puede tomar avena o batidos de frutas y verduras ricos en fibra. Si después de un par de días aún no ha defecado, puede consultar a su médico sobre la posibilidad de tomar un laxante suave.

Recuerde hacer siempre preguntas específicas a su cirujano sobre lo que puede esperar durante el período de recuperación.

Su proceso de recuperación de la rinoplastia

Después de su procedimiento de cirugía de rinoplastia, se le enviará a casa con una hoja de cuidados junto con sus medicamentos para el dolor. También necesitará que un amigo o familiar le haga de chófer durante el día. Es probable que se sienta un poco desorientado, somnoliento y tal vez mareado o con náuseas después de que el efecto de los anestésicos haya comenzado a desaparecer. Tome los analgésicos prescritos según las indicaciones durante este tiempo y no se salte las dosis. Tenga en cuenta que su recuperación dependerá de que su cuerpo esté descansado y relajado, así que no se estrese estando incómodo o con dolor.

Duerma mucho durante los primeros días de su recuperación. Esto permitirá que su cuerpo se cure adecuadamente. Puede esperar algo de hinchazón y tirantez, enrojecimiento y hematomas, y experimentar algo de dolor y malestar. Si alguno de estos síntomas cambia, empeora repentinamente o le preocupa, póngase en contacto con su cirujano plástico facial para que le ayude. Pero sobre todo, siga las instrucciones de su cirujano para obtener los mejores resultados. Si evita los siguientes puntos, ayudará a garantizar que su nariz tenga el mejor aspecto posible y se sienta lo mejor posible.

Consulte con un especialista en reparación de nariz para su procedimiento

Al igual que cualquier otra cirugía, la preparación para la rinoplastia puede ser angustiosa. Sin embargo, sentirse seguro de haber seleccionado al cirujano plástico adecuado puede ayudarle a tranquilizarse. Philip Miller, MD, FACS se ha especializado exclusivamente en cirugía plástica facial y ofrece más de 20 años de experiencia y conocimientos a sus pacientes. Un experto reconocido en la rinoplastia, el Dr. Miller ha sido frecuentemente invitado a compartir sus técnicas específicas con sus compañeros en varias reuniones nacionales de cirugía plástica facial. Ha sido votado entre los mejores médicos de América cada año desde 2007, y también ha sido nombrado un Top Doctor de Nueva York. Para programar una consulta con el Dr. Miller, póngase en contacto con su oficina ubicada en el 60 East 56th Street, tercer piso en la ciudad de Nueva York, llamando al (646) 791-3025.

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Última actualización: 16/08/2019