Walter Gilbert
Busca el origen de los genes
Después de que Gilbert dimitiera de Biotech en 1984, volvió a la Universidad de Harvard. A partir de 1985, trabajó como profesor en los departamentos de física, biofísica, bioquímica y biología de la universidad. Sus antiguos alumnos recordaban con cariño sus estudios. Los laboratorios y las aulas de Gilbert ofrecían un ambiente apasionante en el que todos se consideraban iguales, incluido el propio educador de fama mundial. Los estudiantes disfrutaban trabajando con Gilbert, ya que consideraban que fomentaba la camaradería, demostraba humor y poseía una personalidad contagiosa.
Gilbert también trabajó en el Departamento de Biología Molecular y Celular de Harvard, donde, junto con otros miembros del personal, se involucró en la investigación, el descubrimiento y la formación en áreas biológicas como la biología celular, la bioquímica, la neurobiología, la genética y la bioinformática. Esto le llevó a la investigación de la evolución molecular y al desarrollo de la teoría de la estructura del gen intrón/exón. En esencia, Gilbert se propuso descubrir los orígenes de los genes y cómo evolucionaron. Se cree que dicha teoría, si finalmente se demuestra que es correcta, podría repercutir en el diseño de fármacos, ya que podría permitir a los científicos reconocer y manipular las partes que funcionan dentro de las proteínas.
Esencialmente, el objetivo de la investigación era descubrir de dónde pueden haber venido los genes y cómo eran los primeros genes. En el transcurso del trabajo, Gilbert ideó términos para el patrón interrumpido en el que se almacenan los genes. En la teoría de los intrones/exones, los exones se refieren a las partes que funcionan, mientras que los intrones se refieren a las regiones intermedias donde la célula tiene que empalmar. Si se demuestra que la teoría es correcta, algunos creen que la historia de la vida en la Tierra podría deducirse del ADN de los genes modernos. La teoría de los intrones/exones es algo controvertida y no ha obtenido una aceptación total. En respuesta, Gilbert empleó amplios análisis informáticos y estadísticos para intentar apoyarla. Su colega Philip Sharp, biólogo molecular del Instituto Tecnológico de Massachusetts, que fue el primero en descubrir los intrones primordiales, logro que le valió el Premio Nobel de Fisiología o Medicina en 1993, comentó que resolver el misterio puede ser imposible, pero dio a Gilbert un voto de confianza: «Eso no detendrá a Wally Gilbert, por supuesto… . capturó la imaginación del campo, y todavía la tiene, creo.
Lo que Gilbert ha tratado de hacer es averiguar cómo se ensamblaron los primeros genes en los «océanos de sopa orgánica que una vez cubrieron el mundo entero y dieron lugar a la vida». Obviamente, se trata de una tarea de enormes proporciones. Los genes modernos contienen una gran cantidad de información, y determinar con precisión cómo evolucionaron examinando su estructura sería un proceso largo y complejo. Sin embargo, Gilbert considera que los primeros elementos genéticos eran componentes simples anteriores a los exones modernos. Los primeros exones se mezclaron y se construyeron en largas cadenas que formarían genes cada vez más grandes. Cree que estudiando la estructura de los genes modernos, podríamos encontrar los primeros componentes y luego determinar cómo se produjo el proceso de mezcla y combinación. En su teoría, los intrones serían los elementos que podrían hacer posible la mezcla y el emparejamiento.