República Alimentaria17 de agosto de 2011

IPAs

Los códigos de la moda dictan que sólo se puede vestir de blanco desde el Memorial Day hasta el Labor Day. Pero este verano, varias cerveceras exigen que tu cerveza también tenga el color de la nieve.

El mes pasado, Deschutes Brewery, de Oregón, y Boulevard Brewing, de Kansas City, Missouri, lanzaron el fruto de su colaboración, una IPA blanca. Seguro que te estás rascando la cabeza. Sólo ahora ha empezado a entender el concepto de IPA negra, que combina el amargor de los pinos y los cítricos con notas complementarias de cacao y java. Deschutes y Boulevard han llevado ese concepto al extremo opuesto del espectro de colores, creando una IPA blanca que es el resultado de las especialidades de cada cervecería.

Deschutes es famosa por sus ales de lúpulo, como Hop Henge y Hop Trip, mientras que Boulevard es conocida por su hábil toque con las cervezas de trigo y las ales de granja de influencia belga. (Su Tank 7, seca y llena de lúpulo, es una de mis cervezas favoritas de 2011). El director de Deschutes, Larry Sidor, colaboró con el director de Boulevard, Steven Pauwels. El dúo ideó una receta que incorporaba el perfil característico de cada cervecería, pero se encontraron con un obstáculo al tender un puente entre una witbier turbia y de trigo y una IPA lupulada. La solución herbácea consistió en añadir una medida de hierba de limón, salvia, cilantro y cáscara de naranja, que casó muy bien con el lúpulo cítrico.

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¡Voilà! Sidor y Pauwels llevaron la receta a sus respectivas cervecerías y encendieron sus calderas. La versión de Deschutes se denominó Conflux nº 2, mientras que la de Boulevard se llamó Collaboration nº 2. Aunque los lanzamientos no son gemelos idénticos (eso es totalmente imposible, debido a las diferencias en el agua, el equipo de elaboración y la procedencia de las materias primas), las cervezas son bastante parecidas. Presentan aromas cítricos y herbáceos de piel de naranja y salvia, y cabezas tan esponjosas como un cúmulo de nubes. Todas las versiones se beben secas y crujientes, con un cuerpo cremoso, una carbonatación viva y un buen golpe de pomelo amargo.

Es tan sabrosa que podría estar tentado de guardar unas cuantas botellas para saborearlas después del Día del Trabajo. Algunas reglas están hechas para romperse.

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