Todos los padres quieren que su bebé recién nacido esté sano y sea perfecto. Por eso no es de extrañar que los padres tengan muchas preguntas sobre el desarrollo del cuerpo de su bebé.

Si bien es cierto que un bebé es como una versión en miniatura de mamá y papá, los recién nacidos pueden experimentar el mundo de forma muy diferente a como lo hace un adulto. Muchos de los sentidos y funciones corporales no están completamente formados cuando un bebé nace, y se necesita tiempo para que estas habilidades se desarrollen.

Para dar sentido a lo que experimenta un recién nacido, he aquí un recorrido escrito por el cuerpo en desarrollo, empezando por la cabeza. Hemos contratado a dos de los mejores pediatras para que hagan de «guías turísticos».

La cabeza del recién nacido

Al mirar la cabeza de su bebé, probablemente querrá asegurarse de que esas pequeñas orejas y ojos funcionan bien. El doctor Johnnie P. Frazier, profesor clínico de pediatría en el Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas en Houston, dice que los bebés pueden oír bastante bien cuando nacen. «Las pruebas de audición se hacen al nacer para asegurar esta función», dice el Dr. Frazier.

Los ojos de un bebé, sin embargo, tardan un poco en adaptarse a su nuevo entorno. «Los recién nacidos sólo pueden enfocar entre 20 y 30 centímetros delante de ellos», dice Frazier. «Les gusta centrarse en el rostro humano y prefieren las imágenes sencillas en blanco y negro a las más complejas. Los colores primarios se vuelven más estimulantes alrededor de los dos meses».

También notarás al mirar a tu bebé recién nacido que el cráneo no está completamente formado. «La fontanela, que es el punto blando en la parte superior de la cabeza de un recién nacido, está presente hasta que el bebé tiene entre 9 meses y 2 años de edad», dice la doctora Hannah Chow-Johnson, profesora adjunta del departamento de pediatría del Centro Médico de la Universidad de Loyola en Chicago. «Hay un punto blando más pequeño en la parte posterior de la cabeza que se cierra a la edad de 6 meses».

Los nuevos padres también pueden preguntarse cuándo empezarán a salirle los dientes a su bebé. Aunque los bebés nacen sin dientes visibles, el desarrollo de los dientes de leche comienza realmente en el útero. La estructura básica de los dientes y el tejido duro que rodea a cada diente se forman a los 3 ó 4 meses de desarrollo fetal. El primer diente del bebé (incisivo frontal inferior) aparecerá probablemente a través de las encías alrededor de los 7 u 8 meses de edad. Los incisivos superiores deberían aparecer uno o dos meses después.

El cuerpo del recién nacido

Al nacer, muchos de los huesos del cuerpo del bebé están formados principalmente por cartílago. Esto los hace flexibles, pero muy fuertes. Pero no te sorprendas si tu bebé parece encorvado. «Los bebés parecen ranitas cuando nacen, ya que mantienen los brazos, las piernas y las caderas flexionadas», dice el Dr. Chow- Johnson. «A medida que maduran neurológicamente, empezarán a relajar los brazos y las piernas, que se vuelven más extendidos».

Otra pregunta habitual de los padres es sobre la piel del bebé. «A los padres les puede preocupar que la piel del recién nacido se pele o se sienta seca», dice Frazier. «Los médicos tranquilizan a los padres diciéndoles que esto es normal y que no es necesario ningún aceite adicional». Una pequeña cantidad de loción a base de agua está bien, añade Frazier.

Puede notar un punto en el medio del pecho del bebé llamado proceso xifoide. «Esto parece una pequeña protuberancia en el medio del pecho y es una extensión del esternón», dice Chow-Johnson. «Esto es normal, pero parece más prominente en los bebés».

El sistema inmunitario del recién nacido

La mayoría de los recién nacidos nacen con un sistema inmunitario funcional; sin embargo, no está completamente desarrollado. «El sistema inmunitario está parcialmente protegido por la transferencia de inmunoglobulinas maternas (anticuerpos) a la circulación del recién nacido hasta aproximadamente los 6 meses de edad», afirma Frazier. Pero el sistema inmunitario del bebé aún no ha creado los anticuerpos necesarios para exponerse a los gérmenes durante toda su vida, por lo que hay que tener mucho cuidado para evitar que el recién nacido enferme. «Los padres, otros cuidadores, la familia y los amigos deberán tener cuidado de lavarse las manos antes de manipular al recién nacido y deberán evitar el contacto si está enfermo», dice Frazier. «Tomar precauciones para protegerlos de posibles infecciones es importante.»

Señales del desarrollo del bebé que hay que buscar

El cuerpo de un recién nacido se mueve y reacciona de forma diferente al de los niños mayores, y los recién nacidos tienen algunos reflejos que los niños mayores no tienen. Chow-Johnson comparte algunos reflejos que puede ver en su bebé recién nacido:

• Reflejo de sobresalto. Los brazos y las piernas se extienden por completo, generalmente en respuesta a un movimiento o sonido repentino.
• Cuello tónico asimétrico. También se denomina reflejo de esgrima. Si se mueve la cabeza de un bebé hacia un lado, el brazo al que mira se extenderá mientras el otro se flexiona, por lo que el bebé parecerá que hace esgrima.
• Reflejo de Babinski. Se produce al hacer cosquillas en el pie del bebé con un movimiento ascendente, lo que hace que los dedos se abran en abanico.

«La mayoría de estos reflejos desaparecen normalmente a la edad de 4 a 6 meses», dice Chow-Johnson. El reflejo de Babinski puede persistir hasta los 2 años de edad.

Otros signos tempranos del desarrollo del bebé a los que hay que prestar atención son la sonrisa, la emisión de sonidos del habla y el comienzo de la elevación de la cabeza. Todo esto ocurre aproximadamente al mes. Hacia los 2 meses, el bebé emitirá sonidos más amplios y empezará a mejorar su capacidad de seguirte con la mirada. Hacia los 4 meses, busque que se revuelque, arrulle y se ría.

Como padre o madre primerizos, observarán el cuerpo de su bebé moverse y cambiar con deleite. Si tienes alguna duda o preocupación sobre el desarrollo del bebé, asegúrate de hablar con su médico.