La becaria de ISQua y una de nuestras becarias de ISQua/AGPAL 2018, Isabela Castro, ha compartido su opinión sobre el movimiento ‘¿Qué te importa? El 6 de junio es el día de «¿Qué te importa?», cuyo objetivo es fomentar y apoyar conversaciones más significativas entre las personas que prestan atención sanitaria y social y las personas, familias y cuidadores que reciben atención sanitaria y social.

¡Por fin ha llegado el día! El 6 de junio es el día oficial del movimiento global ¿Qué te importa? ¿Pero sabe lo que significa este día? Pues, en pocas palabras, pretende fomentar y apoyar conversaciones más significativas entre las personas que prestan atención sanitaria y social y los pacientes y familiares que reciben atención sanitaria y social.

En 2010, la entonces directora general del Institute for Healthcare Improvement (IHI), Maureen Bisognano, con sede en Estados Unidos, fue una de las primeras líderes inspiradoras en desafiar a los profesionales sanitarios a mantener conversaciones más estrechas con los pacientes y los familiares.

Ese mismo año, empezaron a producirse más movimientos en Escocia. Con el apoyo de un líder local visionario, Jason Leitch, dos compasivos e innovadores enfermeros escoceses, Jennifer Rogers y Shaun Maher, empezaron a desarrollar formas de averiguar lo que más importaba a sus pacientes.

El primer concepto académico se introdujo inicialmente en un artículo del New England Journal of Medicine, en 2012, por el doctor Michael Barry y Susan Levitan. En lugar de preguntar cuál es el problema, animaron a los proveedores a preguntar «¿Qué le importa?» a sus pacientes.

En 2014, basándose en estas discusiones y en el contexto, los profesionales sanitarios noruegos organizaron un sistema para las personas mayores con el objetivo de apoyarles para que vivan según sus preferencias. Así, fue entonces cuando el 6 de junio fue instituido por Anders Verge, enfermero y jefe de un Departamento de Mejora de la Calidad, como la fecha oficial de la campaña ¿Qué te importa?

En 2015, el movimiento pasó a ser reconocido internacionalmente. Profesionales de todo el mundo empezaron a compartir sus experiencias de conversaciones con sus pacientes en entornos sanitarios, como la Atención Dental, por ejemplo. En el último año, participaron más de 30 países, más de 2 mil equipos y más de 15 millones de impresiones en Twitter. Desde entonces, esta simple, pero poderosa pregunta, se ha convertido en una superherramienta para crear una profunda conexión entre pacientes y proveedores y este cambio se ha ido afianzando en todo el mundo y no sólo está cambiando el equilibrio de poder entre los pacientes y los proveedores de atención, sino que también está mejorando la experiencia de los pacientes y el empoderamiento del paciente en la toma de decisiones compartidas y en el co-diseño de modelos de atención.

Sigo preguntándome… ¿Por qué algo tan simple no ha sucedido antes? En mi opinión, creo que vamos tan deprisa y lidiamos con tanta complejidad y múltiples demandas en el mundo actual, y también en la mayoría de los entornos sanitarios, que siento que nos movemos de forma automática «a toda prisa» con nuestros documentos, reuniones, resultados, rendimiento y todos esos datos de inspección con los que tenemos que lidiar. A veces es simplemente frustrante al final del día tener esa reflexión de «qué he hecho hoy por ellos» o «debería haber hecho más y no lo he hecho». Pero… las cosas cambian por completo cuando te paras a tener una conversación real y estableces una conexión profunda con tu paciente. Puede significar mucho. Puede ser mágico. Esos 20 minutos pueden representar tanto para ellos, y ¡mira tú! estás justo ahí en ese momento crucial para ellos, pudiendo facilitar su viaje y ayudándoles a alcanzar niveles más altos de curación y calidad de vida. ¿Y cómo? Simplemente porque escuchas.

Lo que quiero decir es que nunca es demasiado tarde para recordar a nuestros corazones por qué queríamos una carrera en el cuidado de la salud en primer lugar y que todos somos pacientes en un determinado momento de la vida. Nunca es demasiado tarde para rescatar nuestra genuina vocación de cuidar a los demás y tener alegría en el trabajo… Así pues, la pregunta «¿Qué te importa?» es nuestro momento de pausa y conexión con nuestro interior para vincular nuestros trabajos con el propósito principal de nuestra vida profesional. Puede ser algo muy poderoso para los pacientes pero, créanme, es más poderoso para los proveedores y un puente para alcanzar el Cuádruple Objetivo y cumplir con nuestros retos de mejora y rendimiento del día a día.

Como movimiento global, se ha traducido a múltiples idiomas y se puede preguntar de diferentes maneras. En mi idioma, el portugués, por ejemplo, cuando traducimos de la versión inglesa tenemos la pregunta «o que importa para você?» pero al preguntarla de esta manera, por mi experiencia en el país, no es inmediatamente muy bien entendida por el paciente. Así que se puede ser creativo para preguntar lo mismo de otras maneras, al fin y al cabo, lo importante es establecer una relación, y entender a la persona en el contexto de su propia vida y de las cosas que son más importantes para ella. Independientemente de cómo lo hagas, este conocimiento crucial te sitúa en una posición mucho mejor para trabajar con la persona y encontrar el mejor camino para ella.

Me gustan estos ejemplos del equipo escocés:

• «¿Cuáles son las cosas que son importantes para ti en este momento?»
• «¿Cuáles son algunas de las cosas que te gustaría conseguir como resultado de este apoyo?»
• «Cuando tienes un buen día, ¿cuáles son las cosas que lo hacen bueno?»

¿No es curioso cómo la idea y el significado se traducen tan bien, en diferentes idiomas y en una gama de entornos de atención? Cuando preguntas a alguien «¿Qué te importa?», te ves obligado a verlo como una persona completa y a apreciarlo como un individuo único que merece respeto y dignidad, y no como ocurre a menudo, a referirse a él y tratarlo como una enfermedad o un órgano o un resultado de laboratorio.

Lo último que es importante mencionar es la relación entre el «¿Qué te importa?» y los costes en el sistema sanitario. La compasión puede conducir a la reducción de costes si pensamos en la toma de decisiones compartida como un impulso a la alineación de las expectativas. La comunicación compasiva por sí misma puede ayudar a evitar procedimientos agresivos, manipulaciones tontas y exámenes innecesarios, y otros desencadenantes de sistemas desordenados, que a su vez, comprometen la sostenibilidad del sistema de salud.

Después de llegar al final de este blog espero que usted, pueda ver en la pregunta «¿Qué le importa?» una forma de liderar el cambio en el sistema de salud.

Así que si pudiera dejarle un mensaje de aliento, sería – no espere a que se den las condiciones perfectas, sino todo lo contrario, empiece hoy. Sí. Ahora. En el próximo turno. Habla de ello. En la estación de autobuses. En la iglesia. En el supermercado. Con tus compañeros. Haz la pregunta. Empieza por ti… Sé el líder de ti mismo, y alguien que tu comunidad necesita. Establece la conexión. Escucha. Aprende. Cambia tu sistema en tu pequeño mundo y observa lo que tu trabajo podrá hacer en la vida de las personas. Sé valiente.