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Por qué los equipos no funcionan. Entrevista realizada por Diane Coutu

La creencia de que los equipos nos hacen más creativos y productivos -y son la mejor manera de hacer las cosas- está muy arraigada. Pero Hackman, profesor de psicología organizativa en Harvard y uno de los principales expertos en equipos, no está de acuerdo. La investigación, dice, demuestra sistemáticamente que los equipos no rinden a pesar de todos sus recursos adicionales. En una entrevista con la redactora jefe Diane Coutu, Hackman explica en qué se equivocan los equipos. Sorprendentemente, la mayoría de las veces los miembros no se ponen de acuerdo sobre lo que el equipo debe hacer o incluso sobre quién está en el equipo. La creencia de que más grande es mejor también agrava los problemas; a medida que un equipo crece, el esfuerzo necesario para gestionar los vínculos entre los miembros aumenta casi exponencialmente. Los líderes deben ser implacables a la hora de definir los equipos y mantenerlos reducidos (menos de 10 miembros), y algunos individuos (como los destructores de equipos) simplemente deben ser expulsados. El líder también debe establecer una dirección convincente para el equipo, pero al hacerlo puede encontrar una intensa resistencia que le ponga en gran riesgo. Hackman explora otras falacias sobre los equipos: por ejemplo, que los equipos cuyos miembros llevan mucho tiempo juntos se vuelven rancios. De hecho, las investigaciones revelan que los equipos nuevos cometen un 50% más de errores que los establecidos. Sin embargo, para evitar la autocomplacencia, todo equipo necesita un desviado, alguien que esté dispuesto a hacer olas y abrir el grupo a más ideas. Por desgracia, estos individuos suelen ser expulsados del equipo, robándole la oportunidad de ser mágicos. Los líderes no pueden hacer que un equipo funcione bien. Sin embargo, si son disciplinados en cuanto a la creación y gestión de un equipo, instituyendo los sistemas de apoyo adecuados y proporcionando entrenamiento en los procesos de grupo, pueden aumentar la probabilidad de que un equipo sea excelente.