Una de las ideas erróneas más comunes en el reciclaje en la acera es que todo el vidrio es tratado de la misma manera, por lo que puede reciclar vasos de vidrio, bombillas y ventanas junto con sus botellas y tarros. Lo crea o no, su compañía de reciclaje no quiere estos artículos – y no sólo porque probablemente estén rotos.

Las ventanas son un ejemplo de vidrio tratado, y son mucho más difíciles de romper que una botella de vidrio. Los fabricantes de vidrio utilizan diferentes procesos y materiales para fabricar el vidrio de los contenedores (botellas y tarros) y el vidrio tratado. El vidrio tratado se refuerza con productos químicos para hacerlo más fuerte y menos propenso a romperse.

El proceso para reciclar el vidrio implica fundirlo en un horno. El vidrio tratado requiere una temperatura mucho más alta para fundirse, por lo que si el vidrio de las ventanas se mezcla con el de los contenedores, contamina todo el lote de reciclaje con productos químicos que impiden su uso como contenedores reciclados. Aunque las ventanas podrían reciclarse si todo el vidrio que se reciclara fuera vidrio tratado, las ventanas se desechan con tan poca frecuencia -fuera de los proyectos de demolición de grandes edificios- que la mayoría de las instalaciones de reciclaje no están preparadas para ello.

Reutilice las ventanas cuando pueda

Si tiene ventanas que todavía están en una pieza, intente donarlas para su reutilización. Una opción es la ReStore de Habitat for Humanity. Los ReStores aceptan y revenden todo tipo de materiales de construcción, y su tienda local puede aceptar ventanas. Es más probable que las tiendas acepten sus ventanas si son más nuevas y eficientes desde el punto de vista energético, ya que los clientes querrán este tipo de ventanas para nuevas aplicaciones.

Las ventanas viejas son un material excelente para una variedad de proyectos de bricolaje – particularmente si el marco de su ventana está intacto. Puede hacer tablones de anuncios, organizadores de joyas o incluso un cabecero.

Opciones de reciclaje de ventanas

En la industria del reciclaje, las ventanas se clasifican como residuos de construcción y demolición (C&D). Los Estados Unidos generan más de 500 millones de toneladas de residuos C&D al año (más del doble del volumen de nuestros residuos de envases), por lo que muchos estados han dado un paso adelante para abordar este problema proporcionando listas de recicladores de C&D.

Por ejemplo, CalRecycle mantiene una lista para el estado de California. Puede ponerse en contacto con la agencia estatal de residuos sólidos para ver si pueden remitirle a una empresa que acepte ventanas para su reciclaje.

Más allá del reciclaje

Es posible que pueda mejorar sus viejas ventanas, las opciones se amplían con la tecnología.

Una empresa llamada SolarWindow va un paso más allá: Te permite convertir tus ventanas en paneles solares. Esta empresa estadounidense ofrece una tecnología de pulverización para cualquier superficie de vidrio que permite generar energía solar renovable, y afirma que la tecnología se amortiza en un año en ahorro de energía (en comparación con los cinco a siete años de los paneles solares tradicionales).

La mayor pega en lo que respecta a las ventanas es que lo más probable es que quiera reciclarlas cuando estén rotas, y es entonces cuando tienen menos valor en el mercado del reciclaje. Los riesgos de lesiones al transportar vidrios rotos anulan la mayor parte del valor del material, así que si está planeando una remodelación de la casa, asegúrese de que las ventanas viejas permanezcan intactas.