Ha recibido una citación para comparecer como jurado. Lo más probable es que tenga algunas preocupaciones inmediatas, como ¿tengo que ir y qué pasa con mi trabajo?

Los juicios con jurado son una parte importante del sistema legal en Canadá.

Con algunas excepciones, cualquier persona acusada de un delito penal grave puede elegir un juicio con jurado. Algunos casos civiles también se juzgan con jurados.

Un juicio con jurado es la forma más directa en que los miembros de la comunidad participan en el sistema de justicia.

La mayoría de las personas pueden ser elegidas como jurados. Los posibles jurados son seleccionados al azar y se les dice que se presenten en el juzgado un día determinado.

Cuando llega ese día todos los posibles jurados forman un panel de jurados. De este panel, los abogados, supervisados por el juez, seleccionarán el jurado.

En un caso penal, se eligen 12 jurados; seis en un juicio civil.

Debe presentarse al panel de jurados cuando sea convocado. En caso de enfermedad o dificultad grave, el servicio de jurado puede posponerse o incluso evitarse por completo. Una persona con una discapacidad, que afecta a la capacidad de ser un jurado, también será excusada.

Si usted es seleccionado como jurado, su empleador debe darle el tiempo libre del trabajo.

Por lo general, sólo estará ausente por un día o dos. Sin embargo, es posible que acabe siendo jurado en un juicio que dure varias semanas, o incluso meses en casos extremos.

Se le reembolsarán los gastos de viaje para llegar al tribunal. También se le pagará una modesta cuota diaria por cada día que pase del décimo día de servicio como jurado.

Si es elegido como jurado, no se le permite discutir ningún aspecto del caso con nadie, ni siquiera con su cónyuge. No debe hablar con nadie que se le acerque sobre el caso.

Es un delito grave intentar influenciar, sobornar o amenazar a un miembro del jurado; si alguien lo hace, informe al juez o a otros funcionarios del tribunal lo antes posible.

No hay un código de vestimenta para los miembros del jurado, pero intente no llevar nada demasiado llamativo. Después de todo, se supone que la atención se centra en el caso en cuestión, no en usted.

Por último, su deber como jurado debe tomarse en serio. En casi todos los casos se tratará de decisiones que afectan en gran medida a las vidas de los implicados.

Formar parte de un jurado es una de las confianzas más sagradas en la tradición de nuestro sistema legal.

Greg Monforton & Socios – Abogados de confianza en lesiones en Windsor, ON