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La historia del cuero ecológico

En el sentido verbal estricto de la definición, el término «cuero ecológico» no tiene un significado formal. Sin embargo, existe un gran interés por las pieles que implican un mejor comportamiento medioambiental. Entonces, ¿cómo podemos interpretar la situación actual y entender las cuestiones que rodean el interés por los «cueros ecológicos»?

La fabricación de cuero tiene un impacto medioambiental, ya que en el proceso de fabricación no todos los insumos terminan en el cuero. Además cuando el cuero se desecha el producto se convierte en un material de desecho. Lo que parece haber sucedido es que el indicador de la «ecología» de una piel se mide por la ausencia de ciertas sustancias químicas restringidas, como los tintes azoicos prohibidos, el PCP, el cromo VI, el formaldehído y una lista cada vez mayor especificada por las marcas; o el método de curtido, en lugar de tener en cuenta el impacto medioambiental real. Este impulso se originó en el sector de la automoción (donde el reciclaje de piezas de automóviles está regulado en Alemania), pero más recientemente por los grupos de presión ambiental, las etiquetas ecológicas, los minoristas de la calle o aquellos que buscan obtener una ventaja competitiva a través del posicionamiento del producto.

Es importante juzgar la importancia relevante de todos los diferentes aspectos para poder seleccionar los productos con conocimiento de causa y explicar a los clientes las cuestiones relevantes.

Abordando el tema del curtido en primer lugar, se puede determinar a partir del análisis del ciclo de vida realizado por Ecobilan S.A (Ref. Informe BLC 002) que los tres principales curtidos (cromo, vegetal, aldehído) tienen impactos ambientales muy similares como destaca el siguiente extracto:

Conclusiones principales del estudio:

«Ninguna de las tres tecnologías de curtición estudiadas ofrece una ventaja medioambiental completa sobre las demás cuando se consideran todos los criterios clave que caracterizan el impacto en el medio ambiente de estas tecnologías».

Mucha gente asume que el cuero de curtido vegetal debería tener un perfil medioambiental preferente, pero las pruebas no lo apoyan. Hay que tener en cuenta que todo el propósito del curtido es reticular la matriz de colágeno para evitar la putrefacción y, por tanto, la descomposición.

Por otra parte, a menudo se supone que los cueros curtidos al cromo son menos deseables debido a su contenido mineral, o se cree erróneamente que están curtidos con la sal tóxica del cromo VI. En la actualidad, el cuero se curte con cromo III inerte y el cromo III es esencial para el metabolismo normal de la glucosa, las proteínas y las grasas, por lo que es un elemento dietético esencial. Esto no quiere decir que los cueros curtidos con cromo no tengan problemas de fin de vida potencialmente mayores que los curtidos comparativos.

Los cueros curtidos con aldehídos satisfacen las necesidades del sector de la automoción y parecen encajar en un nicho dentro de los productos para niños que necesitan cumplir con la norma EN71/3, pero pueden tener problemas de manipulación, tratamiento de efluentes y mayor consumo de energía.

Si asumimos que los diferentes tipos de curtición comentados anteriormente tienen impactos similares, debemos considerar la forma en que se fabrica el cuero. Nuestra creencia, basada en una amplia investigación y en el conocimiento de la industria, es que el cuero preferido desde el punto de vista medioambiental puede ser definido por dos parámetros clave:

A. Cómo se fabrica el cuero

B. Qué insumos se utilizan para fabricarlo

Investigaciones dedicadas han demostrado que una parte importante del impacto medioambiental del cuero está en los procesos de fabricación, que lo llevan desde la piel hasta el cuero acabado. En este sentido, son las prácticas de gestión medioambiental de los curtidores, junto con la selección de productos químicos, las que deberían determinar lo ecológico que es un cuero. Si tomamos el modelo adoptado por algunas de las principales marcas del mundo que han estado trabajando en estas cuestiones durante los últimos dos años, podemos determinar las siguientes áreas de la fabricación del cuero que tienen el impacto potencial más significativo:

  • Gestión de sustancias restringidas
  • Consumo de energía
  • Emisiones a la atmósfera
  • Gestión de residuos (peligrosos y no peligrosos)
  • Sistemas de gestión medioambiental
  • Consumo de agua
  • Control de los procesos
  • Tratamiento de efluentes
  • Gestión del cromo
  • Trazabilidad del material

En cuanto a la selección de insumos para el proceso de fabricación es necesario considerar el uso de ciertos materiales que podrían dar un mejor perfil ecológico al cuero. Se trata de elementos como:

  • Agentes humectantes biodegradables para el remojo
  • Procesamiento de sulfuro reducido
  • Sistemas de resistemas de curtido
  • Colorantes naturales
  • Engrasantes a base de aceite vegetal
  • Sistemas de acabado optimizados para reducir los residuos, como el recubrimiento con HVLP o rodillo
  • Biodegradables en 12 meses o menos

En resumen, aunque no existe una definición actual, estos son los elementos clave que creemos deben determinar un cuero ecológico;

a. Control de los procesos de fabricación del cuero

b. Selección de productos químicos de tecnología limpia en el proceso

c. Gestión eficaz de las sustancias restringidas dentro del cuero

d. Una medida del impacto al final de la vida útil

Calificación ecológica del cuero de BLC

BLC opera un sistema de calificación ecológica del cuero. Los minoristas, las marcas o los curtidores que son capaces de cumplir con los requisitos de esta norma son elegibles para utilizar la marca EcoSure.

Esta marca se gestiona conjuntamente con el Leather Working Group (LWG). Para poder utilizar esta marca, las tenerías deben haber conseguido al menos un premio Bronce en el Protocolo de Auditoría Medioambiental de Curtidurías del LWG, llevado a cabo por el BLC, y el cuero acabado en el que se vaya a utilizar la marca debe cumplir los requisitos del régimen de auditoría y pruebas.

Grupo de Trabajo del Cuero

El objetivo de este grupo de múltiples partes interesadas es desarrollar y mantener un protocolo que evalúe el cumplimiento y el rendimiento medioambiental de los curtidores y promueva prácticas empresariales medioambientales sostenibles y adecuadas dentro de la industria del cuero para el calzado.

El grupo busca mejorar la industria del curtido creando una alineación en las prioridades medioambientales, aportando visibilidad a las mejores prácticas y proporcionando directrices sugeridas para la mejora continua.

El objetivo del grupo es trabajar de forma transparente, involucrando a proveedores, marcas, minoristas, expertos técnicos líderes en la industria del cuero, ONGs, instituciones académicas y otras organizaciones interesadas

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