Crédito: Bearfaced

Si es aficionado al vino tinto, sabrá que uno de los consejos para ayudar a «abrir» una botella de vino tinto es airearla o decantarla. Airear significa simplemente introducir aire en el vino, normalmente mediante el proceso de decantación, pero a veces con el uso de un aireador. La idea es que el aire se mezcle con las moléculas líquidas del vino y las separe un poco, lo que facilita la detección de algunos de los sabores más sutiles. No conozco la ciencia exacta que hay detrás, pero los expertos juran por ello.

Si tiene sentido airear el vino, ¿hay que airear el whisky?

Sí y no.

Sí ayuda dejar respirar el whisky haciéndolo girar en la copa, pero no recomiendo usar un aireador ni decantarlo (con el propósito de airearlo). Un dispositivo como el aireador de vino Vinturi podría funcionar para el vino pero es innecesario para el whisky.

Al hacer girar el whisky en su vaso, en cierto modo lo está aireando, y libera más compuestos aromáticos para que sean más fáciles de detectar. No es necesario hacerlo, pero muchos expertos en whisky lo recomiendan.

También libera más vapores de alcohol, lo que puede ser abrumador si es nuevo en el escocés y en los licores de alto volumen de alcohol (40%+). Puede contrarrestar el mayor porcentaje de alcohol añadiendo unas gotas de agua (de nuevo, recomendado por los expertos), lo que reduce el porcentaje de alcohol por volumen y abre todo un nuevo mundo de sabores.

En resumen, no necesita airear el whisky como lo haría con un vino tinto, pero un poco de aire y agua sacará más sabores y mejorará la experiencia. Si alguien quiere venderle un aireador de whisky, huya en dirección contraria.