Cuando encuentras a alguien que te entiende, es probable que lo sepas enseguida. Tal vez sean sus ojos acogedores, o las extrañas similitudes que empiezas a notar a medida que os conocéis.

No importa lo que sea, estas son las cosas que experimentas cuando encuentras a tu persona:

Es eléctrico.

Suena a tópico, pero realmente es la mejor manera de describirlo. Es más que química; esta electricidad captará toda tu atención.

Te sentirás tan fuertemente atraído por él o ella que cuando estéis juntos, no importará nada más. Se alimentarán de la energía del otro.

Habrá, por supuesto, una innegable atracción física; esto es parte de lo que te atrajo a ellos en primer lugar. Pero, pronto te darás cuenta de que es mucho más que algo físico.

Te sentirás atraído por su carácter. Te hará sentir bien tanto física como mentalmente.

No supone ningún esfuerzo.

Cuando encuentres a alguien que te entienda, no necesitarás montar un espectáculo para impresionar al otro porque aprecia tu verdadero yo.

Las cosas por las que solías preocuparte dejarán de ser problemas, y será refrescante no consumirse por detalles innecesarios. No hay juicios por parte de ninguno de los dos.

Tu relación surgirá de forma natural, y los muros que una vez construiste después de que te hicieran daño tantas veces, los que creías indestructibles, empezarán a derrumbarse.

Es sencillo.

La ausencia de palabras está bien cuando estás con él. Aprenderás que el silencio puede unir más a dos personas, y te darás cuenta de lo tranquilo que es no tener la presión de llenar cada momento con palabras.

También es complejo.

Es complejo en el sentido de que es difícil explicar vuestra conexión a una persona ajena. Es intenso y pacífico, íntimo y juguetón, todo al mismo tiempo.

Es un poco aterrador.

Compartirás cosas que nunca pensaste que compartirías con nadie, y pensamientos que nunca pensaste que podrías expresar en voz alta.

Te sentirás vulnerable, pero por alguna razón, eso no te impedirá abrirte.

Es familiar.

Disfrutaréis del tiempo que estéis separados, pero estar cerca del otro es tranquilizador. Cuando estéis juntos, os sentiréis protegidos de todo lo malo del mundo.

Sentiréis que estáis exactamente donde debéis estar.

Vale la pena esperar.

Por fin sentiréis que no tenéis que explicar por qué sois como sois. Ya no tendrás que fingir ni justificar tus acciones.

Cuando encuentres a alguien que te entienda, pronto te darás cuenta de que te ayudará a entenderte mejor a ti mismo.

Se enseñarán mucho el uno al otro y que las relaciones son desafiantes a veces, pero nunca deben ser emocionalmente agotadoras y no importa cuáles sean las circunstancias, nunca debes conformarte.

Aprenderás que tu singularidad es lo que te hace atractivo, y que hay alguien en este mundo que te comprende.

Y ser comprendido es realmente el mayor regalo que podría darte.