Encontrar la fuerza de voluntad para perder peso
Martes, 27 de marzo de 2018 (HealthDay News) — Las personas que hacen dieta a veces atribuyen su falta de éxito en la pérdida de peso a la falta de fuerza de voluntad. La verdad sobre la fuerza de voluntad, sin embargo, es que todo el mundo tiene un poco.
La investigación ha demostrado que te levantas cada día con un suministro limitado que se agota muy rápidamente. Cuanto más utilice la fuerza de voluntad para evitar cualquier tipo de tentación, más rápido se agotará.
La respuesta es guardarla para cuando realmente la necesite.
Por ejemplo, he aquí dos formas sencillas que pueden aplicarse a sus esfuerzos por perder peso:
- Evite tener que tomar decisiones sobre los alimentos antes de cada comida. En su lugar, tómese un tiempo cada fin de semana para elaborar un plan de siete días para la semana siguiente. Incluya los tentempiés, aunque eso signifique hacer comidas más pequeñas en el desayuno, la comida y la cena, de modo que termine el día dentro de su límite de calorías.
- Compre de una lista, y cúmplala. No añada nada más a su cesta.
Pasos como estos pueden ayudarle a limitar su exposición a la tentación.
Pero hay más cosas que puede hacer para mantener su fuerza de voluntad. Por ejemplo, no te saltes ninguna comida o tentempié. Los estudios han demostrado que el autocontrol de las personas es más débil cuando su nivel de azúcar en sangre es bajo. Así que, si puede evitar los periodos de hambre intensa, su autocontrol será más fuerte y no necesitará recurrir a la fuerza de voluntad.
También, algunos juegos cerebrales de ordenador pueden ayudarle a aprender a resistir el impulso de comer alimentos tentadores. Enseñan lo que se llama entrenamiento de inhibición de la respuesta.
Uno de estos juegos ha sido desarrollado por investigadores de la Universidad de Exeter en Inglaterra.
En esencia, el juego ayuda a reprogramar la forma en que el cerebro responde a ciertos alimentos ricos en calorías y poco saludables, según la investigadora principal, Natalia Lawrence.
Los estudios han demostrado que los alimentos ricos en azúcar y grasa «activan el sistema de recompensa del cerebro, estimulando la liberación de dopamina y endorfinas, que pueden producir sensaciones de placer y hacer que la persona quiera más», explican los investigadores en un comunicado de prensa de la universidad.
El entrenamiento incorporado en el juego se dirige a las «respuestas motoras del cerebro a la comida, basándose en nuestra comprensión de cómo se generan los impulsos. Y pretendemos atajar el problema en su origen», dijo Lawrence en el comunicado de prensa.
«Queremos evitar que esos fuertes impulsos se desencadenen del todo, para que los individuos no dependan tanto del autocontrol», dijo.
Otros métodos pretenden hacer lo mismo. Por ejemplo, distraerse con un pasatiempo favorito cuando se enfrenta a la tentación. Puede ser algo tan sencillo como un rompecabezas en el que trabajes sólo cuando tengas ganas de comer.
Ejerce tu fuerza de voluntad y supera la tentación. Al final, dicen los expertos, podría aportarte el tipo de placer que ahora asocias con la comida.
— Personal de HealthDay