Los líderes de la educación en los últimos años han elogiado los avances en el rendimiento y el progreso de los estudiantes K-12 de California, pero un informe nacional anual ha calificado al Estado Dorado por debajo de mediocre – un sólido C-menos, el décimo de la parte inferior entre los 50 estados y Washington, D.C.

Casi en todo el tablero en múltiples categorías calificadas por la revista Education Week, California obtuvo una puntuación por debajo de la media nacional. California obtuvo 69,9 de 100 puntos. En conjunto, la nación recibió una C. Massachusetts se situó en el primer puesto, seguido de Nueva Jersey, Vermont, Nuevo Hampshire, Maryland y Connecticut; todos ellos obtuvieron una B.

El estado se situó en el puesto 41 en cuanto a las condiciones que ayudan a los niños a tener éxito, en el 39 en cuanto a la financiación de las escuelas y en el 30 en cuanto al rendimiento.

«California se ha negado a tomar medidas significativas para abordar los problemas de educación que enfrenta nuestro estado, por lo que no es sorprendente ver que la mala calificación de California sigue siendo la misma año tras año», escribió en un correo electrónico el empresario de Silicon Valley Dave Welch, quien financió un desafío fallido a las leyes de protección de los maestros de California. La demanda, conocida como Vergara contra California, sostenía que las leyes de permanencia y despido perjudican a los niños pobres y a los que más necesitan acceder a profesores de alta calidad.

El informe de Education Week analizó múltiples formas en que los estados están educando y preparando a los niños para la escuela. Para el rendimiento de los alumnos, por ejemplo, la revista consideró 18 medidas como las tasas de graduación, las pruebas de lectura y matemáticas, los resultados de los exámenes de Colocación Avanzada, la equidad y las brechas de rendimiento.

En el rendimiento académico – medido por la prueba de la Evaluación Nacional de Progreso Educativo de 2015 y por las cifras de pobreza – California obtuvo un D-plus. En cuanto a la equidad, California obtuvo una puntuación relativamente alta de B-menos, pero sigue estando en el puesto 41 de la nación y por debajo de la media nacional de B.

¿Cómo es posible que, aunque los funcionarios del estado alaben el progreso educativo, California se compare tan mal con otros estados? Robert Oakes, portavoz del jefe de educación del estado, Tom Torlakson, señaló que Education Week se basa en datos antiguos. «Sin embargo, otros datos estatales de la encuesta son igualmente antiguos. Pero, dijo Oakes, «California se está moviendo en una dirección positiva. Hemos aumentado drásticamente nuestra inversión en educación».

La clasificación refleja no sólo las escuelas, sino también la sociedad: las condiciones que contribuyen al éxito de los niños. Así, mientras los índices de competencia en lectura y matemáticas de cuarto y octavo grado de California estaban todos por debajo del 30 por ciento, California también se vio arrastrada por su pobreza, empleo y bajos niveles de educación de los padres.

Al menos los resultados fueron consistentes en un sentido: En todas las evaluaciones nacionales e internacionales significativas de la educación K-12, California sale mal parada.

Sólo en unas pocas áreas superó California al país. En cuanto a la equidad en la financiación de las escuelas -que se atribuye en gran medida a la revisión de la financiación impulsada por Jerry Brown, que concede más dinero a las escuelas que educan a más estudiantes inmigrantes y pobres-, California obtuvo un notable alto, por encima de la media nacional: un notable. En cuanto a la mejora a lo largo del tiempo, California obtuvo una C, elevándola al noveno puesto de la nación, que tuvo una media de D-plus.

Los datos, dijo Oakes, «muestran que tenemos que seguir avanzando».

Las calificaciones de «Quality Counts» para la educación de California
Los logros del K-12: D+
Finanzas escolares: D+
Oportunidad de éxito: C
Calificación general: C-