Descripción del lobo
El lobo es el mayor cánido salvaje
- Longitud del cuerpo: 100-140 cm (cola 35-50 cm)
- Peso: normalmente entre 20-50 kg, pero también se han visto lobos de más de 70 kg
- El macho es más grande que la hembra
El color base del pelaje del lobo es un amarillo grisáceo. Los pelos negros de guardia son más prominentes en la espalda, los hombros y la punta de la cola. El lado del vientre del lobo es de un tono más claro. El color base de las patas del lobo es gris y la parte delantera de las patas delanteras puede tener una raya negra. La coloración varía un poco de un lobo a otro y, sobre todo, el pelaje de verano puede ser más rojizo o marrón oxidado.
El lobo tiene las orejas erguidas y también se parece a un perro con las orejas erguidas en otros aspectos. Distinguir un lobo de un perro suele ser difícil, pero la cola del lobo, que cuelga recta hacia abajo, es un signo revelador. Las huellas del lobo son similares a las de un perro grande. Las patas delanteras del lobo son más grandes que las traseras. El lobo tiene unos dientes carnales más largos y grandes que los de un perro.
Anatomía
El cráneo y el hocico del lobo son largos, lo que es un requisito previo para un sentido del olfato agudo y bien desarrollado. Se calcula que la superficie del epitelio olfativo del lobo, el tejido responsable de percibir los olores, es 14 veces mayor que la del hombre. El lobo también tiene un oído excelente, pero su vista es su sentido menos desarrollado.
La estructura de los dientes y las mandíbulas del lobo representan un arquetipo típico de depredador. Más del 70% de la dieta del lobo es carne, ya sean animales de presa de diferentes tamaños o cadáveres. La diversidad de la dieta del lobo es claramente visible en la estructura de sus dientes. Los caninos son grandes, pero no especialmente afilados ni aplanados como los del lince. Los dientes carnosos son grandes y muy eficaces para cortar la carne. Los premolares bien desarrollados, que se utilizan para cortar fuentes de alimento más pequeñas, son otro signo revelador de una dieta variada. El lobo también tiene unos molares relativamente bien desarrollados, que aportan flexibilidad a la hora de decidir qué comer. De hecho, los dientes del lobo son más apropiados para una dieta versátil que consiste en algo más que carne que los del lince, por ejemplo.