¿Por qué es posible que los pies descalzos toquen las brasas al rojo vivo sin quemarse? Las brasas comienzan como trozos de madera. La madera está formada por mucho carbono, algunas «moléculas orgánicas volátiles» y agua.

Una molécula orgánica volátil es una molécula basada en el carbono que se evapora cuando se calienta. La gasolina es una molécula orgánica volátil. Vemos estas moléculas orgánicas volátiles de la madera como el humo que sale del fuego. El calor del fuego evapora todas las moléculas orgánicas volátiles, así como el agua. Debido a que han estado ardiendo durante un tiempo antes de la acrobacia, los carbones se han quemado hasta convertirse en carbón casi puro.

Si se cogiera uno de estos carbones de carbón puro, se notaría que es extremadamente ligero. El carbono es un elemento ligero, por eso los cuadros de bicicleta de fibra de carbono y las raquetas de tenis no pesan mucho. Un carbón es principalmente átomos de carbono ligeros y espacios de aire (contiene algunos otros elementos, como el potasio y el calcio — eso es lo que queda en la ceniza).

Esta estructura de carbono ligero es un mal conductor del calor. Se necesita un tiempo relativamente largo para que el calor se transfiera del carbón incandescente a la piel. Si el carbón estuviera hecho de metal al rojo vivo, la transferencia de calor a través de la conducción sería casi instantánea – usted obtendría una quemadura severa.

Ahora, agregue a eso el hecho de que la ceniza es un muy buen aislante. La gente solía usar la ceniza para aislar cajas de hielo y demás. Los carbones al rojo vivo cubiertos de ceniza transfieren su calor aún más lentamente porque la ceniza actúa como una capa de aislamiento.

Luego está el corto lapso de tiempo. La transferencia de calor de un carbón al rojo vivo es lenta, pero aun así se produce. Si te quedas quieto sobre las brasas durante varios segundos, seguro que te quemas. Caminando a paso ligero, se limita el contacto con las brasas a un periodo de tiempo muy corto. También atraviesas el lecho de carbones muy rápidamente, y eso limita el tiempo total de contacto con el carbón. Por lo tanto, su pie nunca se calienta lo suficiente como para quemarse.

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Publicado originalmente: Aug 28, 2004