Añadir alimentos integrales a la dieta de un perro

¿Qué alimentos se consideran «integrales» a la hora de alimentar a Fido? Los alimentos frescos y sin procesar que provienen de una variedad de fuentes constituyen una dieta «integral». Aunque no todos los alimentos frescos son buenos para el consumo de las mascotas, hay muchos que ayudarán a su perro a comer bien. Estas son las principales opciones que muchos propietarios de mascotas y nutricionistas han defendido.

1. Huevos
Los huevos, repletos de proteínas, grasas buenas, vitaminas y minerales, son una opción muy nutritiva. Retira la cáscara para evitar el exceso de calcio y sírvelos revueltos o duros. Aunque se discute si los huevos crudos afectan negativamente a un perro debido a las bacterias, muchos propietarios de mascotas optan por alimentar a sus perros con una dieta cruda. Sin embargo, los huevos son densos en calorías, así que asegúrese de no alimentar con ellos a diario a un perro de raza pequeña.

2. Carne magra
Al igual que con los huevos, el debate entre crudo y cocinado es intenso, pero añadir proteínas animales a la dieta de un perro añade nutrientes. Sea cual sea el método que elija, tenga en cuenta los huesos. Los huesos crudos suponen menos peligro que los blandos y cocidos cuando se trata de atragantarse o astillarse.

3. Frutas y verduras
Muchas frutas y verduras son nutricionalmente beneficiosas para los perros. Considere las variedades crujientes como las manzanas, la sandía, el pepino, las zanahorias, incluso las verduras de hoja verde. Los boniatos son una mejor opción de almidón. Incluso los guisantes pueden ser una delicia. Las verduras crucíferas pueden utilizarse, pero en pequeñas cantidades; no querrá que su perro tenga demasiados gases. Retire todos los huesos y semillas antes de alimentar a su mascota. También debe evitar las uvas y las pasas, que pueden causar problemas renales. Algunas investigaciones también sugieren que los aguacates, el ajo y las cebollas son malas noticias. (Lo siento, Fido, no hay guacamole para ti.)

4. Yogur
¡Los probióticos ganan! El yogur es una gran fuente de estos microbios que mejoran el intestino. Otro beneficio añadido es su contenido en calcio. PetMD.com elogia el yogur como una excelente fuente de nutrientes para los perros. «Añadir una pequeña cucharada de yogur a las croquetas habituales de tu perro a la hora de la comida puede aportar beneficios digestivos e incluso ayudar a tu perro a mantenerse lleno durante más tiempo». También advierten a los propietarios de mascotas que comprueben si el yogur contiene el aditivo xilitol, un edulcorante artificial que es tóxico para los perros. Busca un yogur natural para evitar el azúcar añadido.

5. Sardinas
Aunque no lo creas, estos pequeños peces pueden aportar muchas cosas buenas a la dieta de tu mascota. Las sardinas contienen una poderosa cantidad de ácidos omega 3 y otros nutrientes que pueden prevenir el cáncer y curar la inflamación. Los expertos sugieren comprar sardinas que no tengan sodio añadido, que sean de pesca salvaje y que estén envasadas en agua. Algunos padres de perros incluso utilizan el agua sobrante de la lata como salsa para las croquetas. Tenga cuidado con las porciones y la frecuencia en función del tamaño de su mascota.