5 ventajas de usar cuñas sobre el uso de tacones
Señoras, los tacones no son todo lo que se dice. Alteran la postura, ejercen una presión excesiva sobre las rodillas y las puntas de los pies, e incluso pueden acortar los músculos de las pantorrillas si se usan lo suficiente.
Caramba.
Entonces, ¿qué debe hacer una chica si necesita parecer un poco más alta o más arreglada? ¿Tiene que renunciar por completo a los tacones?
No necesariamente. Afortunadamente, existen las cuñas, que ayudan un poco más a mitigar el daño causado por los tacones pequeños y finos. No son una solución total, pero los efectos negativos se reducen drásticamente al usar cuñas. Especialmente un par de cuñas cómodas y a la vez chic de la nueva colección District de Ariat.
Ariat Belle Bootie
1. Son estables.
Permitir que el pie toque más superficie quita parte de la tensión de la bola del pie. Normalmente las cuñas también tienen más amortiguación, lo que permite que tus pies estén al menos parcialmente protegidos del suelo. Si a esto le añadimos que los materiales de la suela exterior suelen ser más antideslizantes, como el caucho o la madera, tendremos un tacón con el que no nos preocuparemos de caer. Las cuñas de la colección District de Ariat cuentan con suelas de goma Duratread, que te permiten dar pasos seguros a cada paso de tu día.
2. Mantienen tu arco apoyado.
Las cuñas suelen tener una huella más ancha, lo que significa que tu pobre arco no tiene que soportar todo el pie mientras se equilibra en una plataforma del ancho de tu dedo meñique. Esto conduce a un menor desgaste a lo largo de los años, produciendo pies más felices. Y probablemente también puedas caminar más lejos con ellas.
3. Están de moda.
Afortunadamente, las cuñas no son los zapatos que tu abuela podría llevar a una reunión de bingo. Preciosas, elegantes y con estilo, no serás juzgada si te gustan un buen par de cuñas. El nuevo Belle Bootie de Ariat es absolutamente precioso y no te hará perder dinero. Puedes llevarlos de día o de noche, con casi cualquier conjunto.
4. No son tacones altos.
¿Recuerdas aquella vez que casi te rompes un tobillo y posiblemente la cara cuando te falló el equilibrio de camino a un concierto de la banda del instituto, con tu instrumento a cuestas? ¿O esa vez que te sentiste muy sofisticado en una primera cita, sólo para plantar la cara frente a tu incipiente interés romántico? Si no es así, probablemente lo hayas reprimido. Pero, afortunadamente, puedes evitar más recuerdos de ese tipo en el futuro con un buen par de cuñas.
5. No son tacones altos.
En serio, tener cuñas es como tener zapatos de verdad para tus pies, sin dejar de conservar todo lo sofisticado que te gusta de los tacones. Y de nuevo- no te caerás.