A pesar del material alegre, algunas de las historias del set de El Mago de Oz son bastante oscuras. Para una película tan querida y ostensiblemente caprichosa, la producción de El mago de Oz fue un interminable carnaval de miseria para los que trabajaron detrás de las cámaras. Realizada en 1939, sigue siendo muy apreciada por niños y adultos en los tiempos modernos. Sin embargo, hay muchas cosas que la gente no sabe sobre el rodaje de El Mago de Oz. Aunque algunos de los detalles de la producción son relativamente inofensivos, y a veces incluso encantadores, hay que recordar que la película se produjo durante los oscuros días del viejo sistema de estudios de Hollywood.

Entonces, ¿qué hace que las historias entre bastidores de El Mago de Oz sean tan oscuras? Mezclar el consumo excesivo de alcohol y la depravación con unas cuantas catástrofes desafortunadas en el plató, añadir algo de ingenuidad en los inicios del cine y dividirlo entre cinco directores de cine diferentes. De todas las historias entre bastidores del cine, El Mago de Oz tiene algunas de las más extrañas e impactantes. Hay mucho más de lo que preocuparse que de los leones, los tigres y los osos. La sincronización con Pink Floyd puede ser una coincidencia, pero estas historias muestran realmente el lado oscuro del arco iris. Ahora, echa un vistazo a estos datos del Mago de Oz y comprueba por ti mismo lo traicionero que fue el rodaje en ocasiones.